Ser mamá es mucho más que un título o una fecha en el calendario; es un proceso transformador que me ha enseñado que la maternidad va más allá de lo biológico. En este camino, descubro una profunda conexión con la vida y con la capacidad de crear, cuidar y nutrir junto a otro ser. Me maravilla observar cómo la complejidad y la belleza, la diversidad y la riqueza, se manifiestan de distintas formas en las maternidades.
No cabe duda de que la maternidad nos transforma. Nos entrena cada día en habilidades humanas poderosas para criar y acompañar a nuestros hijos e hijas. A través de ella, vivimos experiencias asombrosas e incomprensibles, nos redescubrimos en nuevas dimensiones de nuestra identidad y hallamos un sentido más profundo en nuestro propósito.
Hoy, y todos los días, las celebro y las honro, mamás. Su creatividad para construir este rol con amor, dedicación y pasión es admirable. Agradezco profundamente a todas las mujeres que han sido fuente de inspiración y apoyo en mi vida.
